¡Así Juampi! El peruano Juan Pablo Varillas volvió a ganar un partido a nivel ATP luego de vencer al austriaco Dominic Thiem por 6-3, 5-7 y 7-6(4) por la primera ronda del Gstaad Open, categoría 250. La primera raqueta peruana se llevó el encuentro ante el exnúmero 3 del mundo en dos horas y 52 minutos.
No es la primera vez que Juan Pablo Varillas le gana a Dominic Thiem. El primer duelo entre ambos fue por el marco de los octavos de final del Argentina Open. El peruano apeó al campeón del US Open 2020 por doble 6-4 en el torneo que, a la postre, alcanzaría las semifinales, su mejor registro en una competencia ATP.
Pero en el polvo de ladrillo sueco de esta mañana, el partido se presentó más complicado. Varillas necesitó tres sets para apear al austriaco. En el primero ganó con autoridad; el segundo fue para Thiem. Los fantasmas volvían a aparecer y un 4-2 en contra del peruano acrecentaba los temores. Sin embargo, Juampi remontó y forzó el tiebreak para volver a ganar un partido ATP luego de casi cinco meses.
Puño y dedo señalando al cielo para disfrutar la victoria mientras camina por la tierra batida sueca para saludar a Thiem, quien juega los últimos partidos de su carrera tras anunciar su retiro profesional esta temporada a sus 31 años.
El peruano no ganaba un partido nivel ATP desde el 27 de febrero de este año cuando venció a Francisco Comesaña por los 16avos de final del Abierto de Chile. El próximo rival no será nada fácil. Se trata de Fabio Fognini. El italiano, exnúmero 9 del mundo, es el séptimo preclasificado del torneo y actual 80 del ranking.
Es una temporada más que complicada para Varillas. La primera raqueta nacional no pudo replicar la gran temporada que hizo el año pasado tras alcanzar el número 60 del ranking ATP tras una temporada de arcilla sensacional que terminó con unos octavos de final de Roland Garros ante Djokovic.
Este 2024, el nivel del limeño de 28 años fue muy bajo. No pudo ayudar al país en la Copa Davis y los resultados no se daban en las demás competencias. Juampi ha tenido que regresar a los torneos Challenger para recuperar la confianza. No le fue tan bien. Sin embargo, ha dado un gran paso al superar a Dominic Thiem. La arcilla es la superficie en que mejor se desempeña y Gstaad es una gran oportunidad para retomar el rumbo.
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