
Fútbol Internacional
Alianza Lima volvió a vencer a Deportes Iquique y está en la fase de grupos de la Copa Libertadores
11/03/2025|19:29 hrs.
Es rey de la Champions. El Real Madrid ganó otro duelo de antología ante el Manchester City en un duelo que se ha repetido en las últimas cuatro Champions League. El equipo de Ancelotti se midió ante los de Pep en el Etihad. Los Merengues se llevaron el encuentro de ida gracias a un gol sobre la hora de Jude Bellingham en un auténtico partidazo que no defraudó.
El Madrid inició inquietando el arco de Ederson, El poderío ofensivo madridista estaba intacto, las dudas estaban en la defensa: otra vez Tchouameni improvisando de central y el polifuncional Valverde en lugar del lesionado Lucas Vásquez. Sin Rudiger, Alaba y Militao, el juvenil Asencio acompañó al francés en la saga.
El equipo azul de Manchester sufrió con la ausencia de Rodri, pero más con la de Nico Gonzáles, llegado el fin de semana y lesionado en su primer partido. El City, irregular en la temporada, recuperó ese buen fútbol que lo hizo protagonista europeo los últimos años. Pasado el primer cuarto de juego, Grealish habilitó a Gvardiol en el área blanca. El croata se la bajó de pecho a Haaland para que el Androide mueva las redes del arco de Courtois.
Al descanso se fue el City con la ventaja. En el complemento, los de Ancelotti encontraron la paridad con un disparo mordido de Mbappé, con la canilla, que se coló en la portería de Ederson. El golero brasileño era figura del partido y le negó un gol cantado a Bellingham. Las aguas se apaciguaron y los Cityzens se pusieron en ventaja por un penal cometido por Ceballos. Haaland puso otra vez su nombre en el marcador y el City ganaba 2-1 a diez del final.
Pero al Madrid no se le puede dar por muerto. Ancelotti le dio ingreso a Brahim. El nacionalizado marroquí marcó el empate a poco de los 90 tras un rebote de Ederson por un remate de Vinicius. El exMilan pidió disculpas por su pasado en Manchester, pero no dudó en remarcar que “estaba en el mejor club del mundo”.
El reloj marcó que se habían cumplido los 90 minutos y se entraba en un territorio idóneo para las hazañas del Real. Así fue. Vinicius recuperó, definió pero su disparo se quedó corto. Bellingham llegó como una topadora y la empujó. Otra vez se van de Manchester con una sonrisa. Con ventaja de un gol, el Madrid tiene todo para definir la clasificación a octavos de final en casa.
Necesitas iniciar sesión para comentar