Se podría afirmar que, con respecto a la presentación de los equipos peruanos en los años anteriores en la Copa Libertadores, sí hubo una mejora significativa, medida específicamente por el hecho que ambos conjuntos llegaron con chances en el último partido: uno con opción de clasificar directo a la siguiente fase como Alianza Lima y el otro de pasar a la Copa Sudamericana, en el caso de Universitario.

Ahora bien, en el análisis estrictamente estadístico pormenorizado vemos que ambos equipos desaprovecharon la opción jugando como locales, factor que debió ser mejor aprovechado en la consecución de puntos para que en el último compromiso de cada uno, en situación de visitante, no tuviera el adjetivo de ser hazaña sino una correspondencia y regularidad a lo jugado previamente.

Universitario pierde con Botafogo y empata con Junior, un punto de cuatro posibles, y Alianza Lima empata con Colo Colo y con Cerro Porteño, dos puntos de cuatro posibles.

¿Qué le faltó a Universitario y a Alianza Lima en la Copa Libertadores?

En el análisis técnico, y reconociendo la actitud de los jugadores de ambos planteles, creemos que a Universitario —para el nivel internacional— le faltó un central de mejor jerarquía y un definidor en la zona ofensiva, ambas situaciones en las áreas donde se definen los partidos. Adicional a que en el partido final ante LDU mostró una visible fatiga física.

Mientras que Alianza Lima, en esos dos partidos de local en la Copa Libertadores, tuvo confusiones en los planteamientos y replanteos, con lo que perdió la claridad en la elaboración y definición.

Reiteramos mejoras visibles en las actuaciones, pero como hay una medición que no falla que es finalmente si clasificas o no: ambos quedaron eliminados y les quedará la experiencia para volver a intentar una mejor actuación en el año 2025, caso accedan los dos al certamen.