La FIA vs. Max Verstappen. El piloto neerlandés, actual tricampeón del mundo y posible tetra este año, ha vuelto a estar en la polémica. Esta vez no son sus actuaciones dentro de la pista ni algún choque con colegas, sino que se trata de un enfrentamiento directo con la Federación Internacional de Automovilismo (FIA).

Una de las controversias tras el GP de Singapur, fue el uso de malas palabras, y cómo la FIA busca eliminarlas de las transmisiones. Ese no es el principal inconveniente, ya que los pilotos están de acuerdo. La polémica surgió cuando Max fue sancionado por decir «jodido» en una conferencia de prensa, lo que resultó en que le impusieran «trabajos de interés público».

«No hay absolutamente ningún deseo de dar respuestas largas allí cuando te tratan así. Nunca he sentido que tuviera una mala relación con ellos. Incluso este año, hice trabajo voluntario con comisarios junior. Les hice una entrevista de media hora con todo preparado, así que también intenté ayudar», explicó el ‘1’. «Tienes pequeños favores o lo que sea, , ¿y luego te tratan así? Esto no funciona así», añadió.

«Quiero decir que este tipo de cosas deciden definitivamente mi futuro también. No puedes ser tú mismo o tienes que enfrentarte a este tipo de tonterías. Creo que ahora estoy en la etapa de mi carrera en la que no quieres estar lidiando con esto todo el tiempo. Es realmente agotador. Por supuesto que es genial tener éxito y ganar carreras, pero una vez que has conseguido todo eso, ganar campeonatos y carreras, entonces también quieres pasártelo bien», reconoció.