El del futuro de Max Verstappen comenzó a ser vinculado desde Italia con Mercedes. El título parece más alejado que nunca tras el error de Kimi Antonelli que le dejó fuera el Red Bull Ring, y el 2026 emergió como un cañón.

Pero Max no se andó con rodeos. «No voy a hablar de mi contrato», dijo directamente. No quiso charlar sobre cláusulas o salidas. «No tengo nada diferente que decir a lo que comenté la semana pasada [antes del GP de Austria. No tuvimos un buen resultado en un fin de semana que no fue bueno y no tuvimos mucha suerte. No habríamos peleado con McLaren, pero sí por un resultado decente. Todo lo demás sigue igual, nada cambia por mi parte», relató.

Aunque Russell tuvo un mensaje claro y el papel protagonista en la rueda de prensa de los pilotos, Verstappen movió masas. El piloto más reclamado por la prensa, que inundó el hospitality de Red Bull. Pero nada cambió en el neerlandés.

Ni las preguntas sobre el 2026. «No pienso en el próximo año. Pienso en el trabajo que tengo por delante y el trabajo con el equipo. Luego la gente hace suposiciones, pero no soy yo», lanzó.