El sol aún no sale para Checo Pérez en la Fórmula 1. El piloto mexicano tuvo otra jornada de pesadilla en Silverstone, el GP que marca la mitad de la temporada. Pérez no se sube al podio de la máxima categoría desde el GP de China, en abril. Su mejor resultado ha sido un P7 en Austria. Pero con el coche que tiene y las obligaciones que demandar vestir el azul de Red Bull, no es suficiente. Y él lo sabe, y Christian Horner, también.

El jefe de equipo de la escudería de la bebida energética admitió con mucha honestidad que el momento del nacido en Guadalajara debe ser revertido pronto. “[Pérez] sabe que no es sostenible no sumar puntos. Tenemos que sumar puntos con ese coche y él lo sabe”, dijo el británico. “Él conoce su papel y su objetivo, así que nadie está más ansioso que Checo por recuperar su forma”.

Horner añadió: «Somos muy conscientes de ello: para ganar el campeonato de constructores es necesario que ambos coches puntúen». Actualmente, la escudería austriaca ocupa el primer lugar en el campeonato de constructores con 373 puntos, seguido de Ferrari (302) y McLaren (295).

En Silverstone, Checo no condujo el RB20 en la primera práctica por el debut del joven francés reserva de Red Bull, Isack Hadjar. El sábado, en la jornada de clasificación, la suerte otra vez estuvo muy lejos de su lado y su auto se desvió de la pista provocando que abandone en la Q1. En la carrera del domingo, terminó P17.

“Por supuesto que hay frustración cuando los dos coches no rinden bien en conjunto, y creo que fue frustrante perder a Checo en la Q1 ayer”, respondió. “Se había perdido la P1 por la conducción de Isack Hadjar, había tenido una P2 decente, pero debería haber estado entre los seis primeros, y perder ese coche en la Q1 fue muy frustrante, así que sí, ahí es donde estamos”.